Los montañeros también lloramos
Sierra Bermeja: Cerro del Castellón (o Cerro Castillón) y Pico los Reales
Hemos vivido un montón de experiencias inolvidables desde que un día comenzamos a caminar, hemos ascendido docenas de montañas, las más altas y escarpadas, sorteado cientos de dificultades, atravesado neveros resbaladizos de blanca traición, descendido a barrancos tenebrosos, caminado sobre crugientes ríos de hielo, trepado por precipicios, bajo el sol, la nieve, la lluvia y el viento… nunca nada nos ha detenido en nuestro recorrer montañero, ningún revés, ninguna adversidad, pensábamos que ya teníamos curtido nuestros músculos, nuestros pulmones, nuestro ánimo y también nuestra alma y corazón, nada ni nadie nos podía conmover.
El pasado domingo, 17 de octubre de 2.010, vivimos una jornada, entre montañera y festiva, que nos recordó nuestra condición de seres humanos de espíritu delicado y corazón tierno.
El día comenzó como uno de tantos, caminando despacio, esta vez por Sierra Bermeja, siguiendo un sendero señalizado conocido como el Paseo de los Pinsapos, descrito en el reportaje cuyo enlace se adjunta: Pico Los Reales.
Hemos vivido un montón de experiencias inolvidables desde que un día comenzamos a caminar, hemos ascendido docenas de montañas, las más altas y escarpadas, sorteado cientos de dificultades, atravesado neveros resbaladizos de blanca traición, descendido a barrancos tenebrosos, caminado sobre crugientes ríos de hielo, trepado por precipicios, bajo el sol, la nieve, la lluvia y el viento… nunca nada nos ha detenido en nuestro recorrer montañero, ningún revés, ninguna adversidad, pensábamos que ya teníamos curtido nuestros músculos, nuestros pulmones, nuestro ánimo y también nuestra alma y corazón, nada ni nadie nos podía conmover.
El pasado domingo, 17 de octubre de 2.010, vivimos una jornada, entre montañera y festiva, que nos recordó nuestra condición de seres humanos de espíritu delicado y corazón tierno.
El día comenzó como uno de tantos, caminando despacio, esta vez por Sierra Bermeja, siguiendo un sendero señalizado conocido como el Paseo de los Pinsapos, descrito en el reportaje cuyo enlace se adjunta: Pico Los Reales.
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Señalar tan solo un incidente de gravedad. Un par de guías locales fueron conduciendo a lo largo del recorrido a un pequeño grupo de montañeros de Mijas, quienes confiados en el buen hacer y profesionalidad de los susodichos guías no se dieron cuenta de que se habían pasado un desvío a la izquierda y solo cuando comenzaron a escuchar las aguas del río que recorre el Valle del Genal advirtieron el error. Alarma, nervios, llamadas a los expertos y vuelta atrás.
Justo aquí queremos dejar por escrito, en representación del maltratado grupo de mijeños, nuestra reclamación más enérgica a la Organización de la ruta, instarla a que amoneste severamente en acto público a los guías indicados cortándoles los cordones de la botas y que tome las medidas necesarias para que de ahora en adelante impida a los perversos guías consumir los aguardientes que seguramente se tomaron antes de comenzar la marcha.
Unos cuantos ascendimos al Cerro del Castellón y todos al Pico los Reales.
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En la fantástica cumbre del Cerro Castellón:
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Subiendo al Pico los Reales:
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En la cumbre del Pico los Reales:
A la izquierda de la fotografía anterior, Carlos Sisí, célebre autor de dos novelas de terror, éxito de ventas, Los Caminantes y Necrópolis.
Para bajar al Área Recreativa Los Reales unos cuantos descendimos por el PR-A 164 hasta el Mirador de Salvador Guerrero:
Poco después llegamos al Área Recreativa Los Reales en donde, como viene siendo habitual últimamente, corrió la cerveza, el vino, el champán y las tartas, y donde Katy, Maestra de Ceremonias del recién creado “Grupo de Senderismo Las Águilas”, aceleró nuestras emociones con el homenaje sorpresa preparado a un querido montañero y compañero.
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Etiquetas: Cerro del Castellón, Sierra Bermeja